Yoo Seung-jun comparte su sentir en YouTube: 'Mi familia me da fuerzas, rezo para que se resuelvan los malentendidos'
El cantante Yoo Seung-jun (nombre estadounidense Steve Yoo), cuya entrada a Corea del Sur ha estado restringida durante más de dos décadas, compartió su situación actual y sus sentimientos más sinceros a través de su canal de YouTube.
Recientemente, Yoo publicó un video de su segundo hijo, Ji-an Yoo, participando en una competencia de natación, mostrando su lado tierno como padre. Tras animar a su hijo durante la carrera, confesó entre lágrimas: "Hay momentos en que mi corazón se rompe por verdades retorcidas y sinceridad distorsionada, pero encuentro fuerzas porque tengo a mi amada familia."
También abordó los malentendidos sobre su deseo de visitar Corea. "Algunas personas piensan que quiero ir a Corea con fines comerciales, pero ya estoy viviendo una vida suficientemente feliz y agradecida", enfatizó, aclarando que sus intenciones no son económicas. Añadió: "Rezo sinceramente para que todos los malentendidos que nos bloquean se resuelvan."
Yoo Seung-jun, cuyas actividades en Corea fueron prohibidas tras obtener la ciudadanía estadounidense en 2002, ha estado esforzándose por reparar su relación con el país durante los últimos 20 años. A pesar de haber ganado dos batallas legales, sus solicitudes de visa siguen siendo rechazadas, lo que lo impulsa a buscar una tercera demanda.
Para Yoo Seung-jun, Corea sigue siendo no solo un escenario para sus actividades, sino sus raíces y una patria anhelada. Su vida cotidiana con su familia, entrelazada con su sincero deseo de aclarar los malentendidos, ofrece una visión de su anhelo por la verdadera reconciliación y comprensión.
En agosto de 2004, Yoo Seung-jun participó en un torneo de baloncesto de celebridades coreanas celebrado en Hong Kong, señalando su intención de regresar a la escena nacional. Los organizadores en ese momento aclararon que su participación fue en "capacidad personal" y no estaba relacionada con ninguna aprobación gubernamental. Esta acción provocó una considerable controversia pública, intensificando aún más el debate en torno a su prohibición de entrada.